Prevención y mantenimiento en instalaciones que suponen un riesgo en Legionella.

Un adecuado mantenimiento de nuestras instalaciones es vital para la prevención del riesgo de Legionella. Como responsables de las instalaciones hemos de reforzar todas las medidas de prevención posibles y coordinar con profesionales competentes del sector, la puesta a punto necesaria para evitar la Legionella.

Hay que evitar las condiciones ambientales que favorecen la colonización y multiplicación de la Legionella en nuestras instalaciones, como son temperaturas de entre 25 y 45ºC, aguas estancadas y sin movimiento, y acumulación de biofilm en nuestras redes que sirvan de alimento a la bacteria.

Mediante empresas autorizadas y profesionales para realizar los trabajos, hemos de realizar las limpiezas y desinfecciones periódicas señaladas por la normativa, así como las iniciales a la puesta en marcha de una instalación.

Sobretodo en instalaciones susceptibles de riesgo de legionella, como hospitales, clínicas y residencias geríatricas este control ha de ser la principal medida de prevención y control.

Es muy importante que los responsables de las instalaciones cumplan la normativa vigente en materia de prevención y control ya que si no fuera así se genera un gravísimo problema proliferación de la bacteria con sus posibles consecuencias en la salud pública.